Esta primavera estoy realizando muchas actividades para conocer el patrimonio de nuestra dehesa boyal. Muchos días observando, aprendiendo y divulgando todos sus recursos y valores naturales y culturales.
Cuando hablo de los yacimientos arqueológicos, siempre digo que su primer descubridor fue mi buen amigo Domingo Quijada González, cuando ya en su etapa de estudiante universitario les decía a sus amigos que allí había restos arqueológicos de hace miles de años que databan de la prehistoria.
Domingo es un gran investigador, meteorólogo y cronista oficial de Navalmoral de la Mata, donde es muy querido y respetado.
Y digo esto, porque quiero hacer justicia con él, para que nuestro pueblo reconozca su trayectoria, su labor divulgativa encaminada a poner en valor nuestra historia y nuestra cultura.
Cuando realizo actividades por La Puente hablo de sus investigaciones relativas a la datación de este puente que siempre hemos denominado romano, cuando es un puente medieval.
De sus trabajos sobre la Gorra de Montehermoso, de Los Negritos, que tanto contribuyeron a que fueran declarados Fiesta de Interés Turístico Regional. De eso y de su impresionante trayectoria en los Coloquios Históricos Culturales del Campo Arañuelo y los Coloquios Históricos de Extremadura.
Estoy en contra de la sumisión cultural de valorar más lo de fuera, que lo que tenemos dentro. Eso de que gente por ser de fuera son mejores, ha sido la costumbre habitual... Hemos olvidado que hay gente en Montehermoso de mucho valor y que olvidamos o damos de lado.
Pero al final, es esta gente la que pone en valor nuestro patrimonio, nuestra historia, nuestra cultura y nuestros recursos naturales…y en general la que lucha y defiende como nadie nuestro legado cultural y natural.
A mi buen amigo Domingo, en Montehermoso a 23 de mayo de 2018