Un
paso más en la custodia del territorio
El
sábado 28 de junio, vivimos una jornada productiva de trabajo y colaboración en
el río Alagón. Por la mañana, realizamos una visita al terreno con Adrián Muñoz
Sánchez, presidente de la Unión de Pescadores de Valdeobispo.
El
objetivo principal de este encuentro fue explicar de primera mano las
importantes actuaciones que el proyecto LIFE Alnus Taejo está implementando en
este tramo del río. Todas estas acciones están enfocadas en la mejora y
conservación de nuestros valiosos ecosistemas fluviales, garantizando su
sostenibilidad a largo plazo.
Esta
visita no solo sirvió como un espacio para el intercambio de información
detallada sobre el proyecto, sino que fue fundamental para establecer las bases
de una colaboración conjunta y sólida. Este compromiso quedó oficialmente
sellado con la firma de un Acuerdo de Custodia del Territorio entre ambas
entidades.
Este acuerdo representa un hito significativo, ya que fortalece nuestro compromiso compartido con la naturaleza y se suma a una lista cada vez más extensa de colaboraciones y acuerdos que hemos establecido con ayuntamientos, asociaciones y propietarios particulares dentro de la zona de influencia del proyecto. La custodia del territorio es una herramienta fundamental que promueve la implicación de la sociedad en la conservación del patrimonio natural y cultural, buscando un beneficio mutuo para las personas y el medio ambiente local y global, de forma resiliente.
Los
acuerdos de custodia del territorio son esenciales para el éxito de iniciativas
de conservación como la de LIFE Alnus Taejo. Permiten establecer alianzas
estratégicas que van más allá de la duración del proyecto, asegurando la
continuidad de las acciones y el compromiso a largo plazo de entidades,
colectivos y personas del entorno. Hasta la fecha, desde AMBIENTA, hemos
firmado importantes acuerdos de custodia del territorio en la provincia de
Cáceres con diversos ayuntamientos, incluyendo Montehermoso, Valdeobispo,
Carcaboso, Jerte, Casas del Castañar, Rebollar, Valdastillas, Pinofranqueado y
Azabal. Próximamente, más municipios se sumarán a la firma de estos acuerdos.
Además
de estas colaboraciones con entidades municipales, también hemos establecido
acuerdos con asociaciones de pescadores, actores clave en la conservación de
los ecosistemas fluviales. Entre ellas se encuentran la Agrupación de
Pescadores de Montehermoso y la Unión de Pescadores de Valdeobispo, cuyo
presidente nos acompañó en esta jornada. La participación de los pescadores es
crucial, ya que su conocimiento del río y su interés directo en su buen estado
los convierten en aliados indispensables para la implementación de medidas de
conservación.
A estos se suman tres acuerdos con propietarios particulares en Montehermoso y Carcaboso, quienes han demostrado un compromiso ejemplar con la conservación de nuestros ríos, entendiendo la importancia de su papel en la salud del ecosistema. Estos acuerdos individuales son un testimonio del creciente interés y la concienciación sobre la necesidad de proteger nuestros recursos naturales.
Colaboración
transfronteriza y multidisciplinar
El alcance de nuestro proyecto y la efectividad de los acuerdos de custodia del territorio se ven potenciados por la colaboración transfronteriza y multidisciplinar. Nuestras compañeras Silvia Ribeiro, de la Universidad de Évora en Portugal, y Myrian Palomo, de CESEFOR en Castilla y León, también han logrado sumar importantes acuerdos a nuestro proyecto. Esta amplia red de colaboradores en Portugal, Salamanca y Cáceres es fundamental para garantizar el impacto y la sostenibilidad de las acciones emprendidas.
Demuestra que la conservación de nuestros ríos no tiene fronteras y que el trabajo conjunto de diversas instituciones y expertos es un paso esencial para lograr un impacto significativo y duradero en la protección de nuestros valiosos ecosistemas fluviales. La suma de estos esfuerzos es lo que nos permite abordar los desafíos de la conservación de una manera integral y efectiva, asegurando una gestión coordinada y un impacto ampliado en los ecosistemas fluviales que compartimos.
Un impulso crucial
para la conservación de nuestros ríos