 |
| (Águila culebrera) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón |
Listado de especies nidificantes en los últimos 5 años a menos de 2 km de la zona afectada
Águila culebrera
(Circaetus gallicus)
Águila calzada (Hieraetus pennatus)
Halcón abejero (Pernis apivorus)
Ratonero común (Buteo buteo)
Milano negro (Milvus migrans)
Milano real (Milvus milvus)
Elanio común (Elanus caeruleus)
Búho real (Bubo bubo)
Búho chico (Asio otus)
Mochuelo común (Athene noctua)
Cárabo común (Strix aluco)
Lechuza común (Tyto alba)
Autillo Autillo
(Otus scops)
Cigüeña negra (Ciconia nigra)
Cigüeña blanca (Ciconia ciconia)
Garza real
(Ardea cinerea)
Zampullín chico
(Tachybaptus ruficollis)
Ánade azulón
(Ánas platyrhynchos)
Chorlitejo chico
(Charadrius dubius)
Perdiz roja
(Alectoris rufa)
Codorniz
(Coturnix coturnix)
Paloma bravía
(Columba livia)
Paloma torcaz
(Columba palumbus)
Tórtola turca
(Streptopelia decaocto)
Tortola europea
(Streptopelia turtur)
Cuco
(Cuculus canorus)
Críalo (Clamator glandarius)
Chotacabras pardo (Camprimulgus ruficollis)
Vencejo común
(Apus apus)
Vencejo pálido
(Apus pallidus)
Abubilla
(Upupa epops)
Martín pescador
(Alcedo athis)
Abejaruco común
(Merops apiaster)
Pico picapinos
(Dendrocopos major)
Pico menor
(Dendrocopos minor) *Zona de cría en la zona afectada
Torcecuello
(Jynx torquilla)
Cogujada común
(Galerida cristata)
Cogujada montesina
(Galerida theklae)
Totovía (Lullula arborea)
Calandria (Melanocorypha calandra)
Avión roquero (Ptyonoprogne rupestris)
Golondrina común (Hirundo rustica)
Golondrina dáurica (Hirundo dáurica)
Avión común (Delichon urbicum)
Lavandera blanca (Motacilla alba)
Lavandera cascadeña (Motacilla cinerea)
Alzacola rojizo (Cercotrichas galactotes)
Ruiseñor común (Luscinia megarhynchos)
Colirojo tizón (Phoenicurus ochruros)
Collalba rubia (Oenanthe hispanica)
Tarabilla común (Saxicola torcuatus)
Mirlo común (Turdus merula)
Curruca capirotada (Sylvia atricapilla)
Curruca mirlona occidental (Sylvia hortensis)
Curruca cabecinegra (Sylvia melanocephala
Curruca tomillera (Sylvia conspicillata)
Curruca carrasqueña (Sylvia cantillans)
Curruca rabilarga (Sylvia undata)
Buitrón (Cisticola jundicis)
Ruiseñor bastardo (Cettia cetti)
Zarcero común (Hippolais polyglota)
Chochin (Troglodytes troglodytes)
Papamoscas gris (Muscicapa striata)
Carbonero común (Parus major)
Herrerillo común (Parus caeruleus)
Mito (Aegithalos caudatus)
Trepador azul (Sitta europaea)
Agateador común (Certhia brachydactyla)
Alcaudón real
(Lanius meridionalis)
Alcaudón común
(Lanius senator)
Rabilargo
(Cyanopica cyanus)
Urraca (Pica pica)
Arrendajo (Garrulus glandarius)
Cuervo (Corvus corax)
Estornino negro (Sturnus unicolor)
Oropéndola (Oriolus oriolus)
Gorrión común (Passer domesticus)
Gorrión moruno (Passer hispaniolensis)
Gorrión chillón (Petronia petronia)
Pinzón vulgar (Fringilla coelebs)
Pardillo común (Carduelis cannabina)
Jilguero europeo (Carduelis carduelis)
Verderón común
(Carduelis chloris)
Verdecillo
(Serinus serinus)
Picogordo
(Coccothraustes Coccothraustes)
Escribano soteño
(Emberiza cirlus)
Triguero
(Miliaria calandra)
Escribano montesino
(Emberiza cia)
88 especies afectadas en su zona de cría y reproducción
 |
| (Búho Real) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón |
* Zona de cría a 350 metros de la zona afectada: Águila calzada (1), milano negro (2)
*Zona de cría dentro de la zona afectada: Pico menor, alcaudón común, carbonero común, jilguero europeo, verderón común, gorrión común…y algunas especies menores más.
*Águila perdicera (Hieraetus fasciatus) tenía su área de cría a 3 km.
Especies que sin ser nidificantes, hacen uso de esta zona y alrededores, bien sea en invernada, o el resto del año, de forma habitual, como zonas de alimentación, campeo o cazaderos, pero sin indicios de cría:
Buitre leonado
(Gyps fulvus)
Buitre negro
(Aegypius monachus)
Halcón peregrino
(Falco peregrinus)
Aguilucho cenizo
(Circus pygargus)
Gavilán
(Accipiter nisus)
Alcotán
(Falco subbuteo)
Cernícalo común
(Falco tinnunculus)
Cernícalo primilla
(Falco naumanni)
Alcaravan
(Burhinus oedicnemus)
Garceta grande
(Egretta alba)
Garceta común
(Egretta garcetta)
Garcilla bueyera
(Bubulcus ibis)
Cormorán grande
(Phlacrocorax carbo)
Somormujo lavanco
(Podiceps cristatus)
Pato cuchara
(Anas clypeata)
Cerceta común
(Anas crecca)
Gaviota reidora
(Larus ridibundus)
Gaviota sombría
(Larus fuscus)
Grulla común
(Grus grus)
Avefría
(Vanellus vanellus)
Chorlito Dorado
(Pluvialis apricaria)
Andarríos grande
(Tringa ochropus)
Andarríos chico
(Actitis hypoleucos)
Agachadiza común
(Gallinago gallinago)
Alondra común
(Alauda arvensis)
Bisbita pratense (
Anthus pratensis)
Acentor común
(Prunella modularis)
Petirrojo europeo
(Erithacus rubecula)
Zorzal común
(Turdus philomelos)
Zorzal alirrojo
(Turdus iliacus)
Zorzal charlo
(Turdus viscivorus)
Mosquitero común
(Phylloscopus collybita)
Reyezuelo listado
(Regulus ignicapilla)
Estornino pinto
(Sturnus vulgaris)
Herrerillo capuchino
(Parus cristatus)
Grajilla
(Corvus monedula)
36 especies afectadas
Especies que paran escasos días en los pasos pre y/o pots-nupciales, migratorios o se han observado en la zona.
Correlimos común
(Calidris alpina)
Colirrojo real
(Phoenicorus phoenicorus)
Mosquitero musical
(Phylloscopus trochilus)
Papamoscas cerrojillo
(Fidecula Hypoleuca)
Tarabilla norteña
(Saxicola rubetra)
Lavandera boyera
(Motacilla flava)
Correlimos zarapitín
(Calidris ferruginea)
Collalba gris
(Oenanthe oenanthe)
Carraca europea
(Coracias garrulus)
Curruca mosquitera
(Sylvia borin)
Escribano palustre
(Emberiza schoeniclus)
Lechuza campestre
(Asio flammeus)
12 especies afectadas
Otras especias amenazadas:
Mamiferos:
Jabalí
(Sus scrofa)
Zorro
(Vulpes vulpes)
Tejón
(Meles meles)
Gineta
(Genetta genetta)
Comadreja
(Mustela nivalis)
Garduña
(Martes foina)
Gato montés
(Felis silvestris)
Meloncillo
(Herpertes ichneumon )
Turón
(Mustela putorius)
Liebre
(Lepus granatensis)
Conejo
(Oryctolagus cuniculus)
Nutria
(Lutra lutra)
 |
| (Zorro) Foto: Cesar Clemente Clemente |
 |
(Nutria) Foto: Cesar Clemente Clemente
Reptiles:
Lagarto ocelado (Lacerta lepida)
Galápago leproso (Mauremys caspica)
|
 |
(Galápago leproso) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón
AGRESIONES AMBIENTALES EN LA DEHESA BOYAL |
La Asociación Andares muestra su preocupación por las continuas agresiones ambientales que viene sufriendo desde hace años la dehesa boyal de Montehermoso. Los fines de semana este entorno es ocupado por jóvenes participando en varios botellones que producen un ruido ensordecedor y personas en quads que se dedican a hacer derrapes por el Complejo Etnográfico, lugar que aparece lleno de rodadas por toda la zona, causando estupor y malestar en los ciudadanos que pasean e intentan disfrutar de la naturaleza de este entorno, y que reclaman una mayor vigilancia por parte del ayuntamiento ya que daña ostensiblemente la imagen del municipio.
 |
| (Cigueña negra) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón |
Las últimas actuaciones en las que se han arrancado decenas de encinas centenarias para construir un ferial en un hermoso paraje de nuestra dehesa cercano al cementerio causaran un grave problema ambiental a toda la biodiversidad de este entorno natural, ya que al celebrarse el ferial en junio y con el ruido tremendo que producirá en esta zona, incidirá muy negativamente en la época de reproducción de las rapaces (varias de ellas amenazadas y con un marco de protección muy severo).
Todo esto no parece haberse tenido en cuenta en el estudio de Evaluación de Impacto Ambiental de este proyecto, más si tenemos en cuenta que en los últimos años han desaparecido más del 60 % de ejemplares de rapaces amenazadas, entre ellas especies como el águila imperial, águila perdicera, águila culebrera, águila calzada, ratonero, milano negro, milano real, elanio común. Además destacamos la desaparición de la cigüeña negra, la gran mayoría de anátidas y varios ejemplares de martín pescador. Con el proyecto de construcción del ferial en la dehesa y con los usos y actuaciones que luego se darán a este espacio se puede terminar con el 80% de toda la población de rapaces que habitan en este entorno natural, que verán como su área de cría y reproducción sufrirá constantes molestias y amenazas por ruido y proliferación de vehículos a motor.
La dehesa Boyal de Montehermoso ha pasado de ser uno de los entornos más favorecedores para la cría y reproducción de rapaces amenazadas, a tener una de las zonas más castigadas y en la que más especies están desapareciendo.
También expone que si se lleva a cabo la romería de Valdefuentes en este espacio y no se toman las medidas oportunas, la dehesa sufrirá un impacto ambiental de graves consecuencias por el excesivo flujo de visitantes, ya que esto implicaría que por la zona entrarían entre 6.500 0 7.000 personas y más de 2.000 vehículos que llenarían la dehesa de restos y basura y causaría un enorme daño al ecosistema.
Andares recuerda que la gran mayoría de actuaciones en este espacio natural incumplen las directrices de la Estrategia para la Conservación del águila imperial ibérica y que en este sentido deben cumplir los municipios adheridos a la RED MAI (Red de Municipios por el Águila Imperial Ibérica) a la cual también pertenece el municipio de Montehermoso. La asociación Andares es la pionera en impulsar desde hace años la iniciativa de que el Parque Arqueológico-Etnográfico de Montehermoso se declare Bien de Interés Cultural, y que todo el entorno natural tenga la protección que exige la legislación ambiental existente a nivel autonómico, nacional y comunitario.
Las circunstancias específicas que convergen en la dehesa boyal, hacen que nuestro municipio haya quedado parcialmente al margen de varios proyectos educativos debido al proceso generalizado de degradación al que se ha visto sometido este paraje en los últimos años. No hay que olvidar, que este entorno natural constituye un reducto excepcional para la reproducción de numerosas especies que están en peligro de extinción y que tienen un alto grado de protección que viene recogido en varias leyes y directivas ambientales.
Han sido varios grupos, colectivos y asociaciones conservacionistas de diferentes partes de España que han visitado nuestra dehesa y han podido comprobar el proceso de abandono del patrimonio arqueológico-etnográfico y la contaminación y degradación del entorno natural. Algo que ha dejado una muy mala impresión de nuestro municipio.
 |
| (Bañas de Los Manantios) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón |
Un grave error que se está cometiendo es el no valorar la potencialidad del municipio en cuanto a asumir una apuesta firme por el turismo sostenible, porque si de algo se tiene que ocupar el ayuntamiento de Montehermoso, es de proteger el medio ambiente y conservar nuestra rica biodiversidad. Se trata de un patrimonio natural en el que descansan nuestras posibilidades de desarrollo sostenible en el futuro directo beneficiario de paisajes y ecosistemas en buen estado. El desarrollo sostenible no debería tener que pasar necesariamente por un crecimiento económico y urbanístico a cuenta de nuestro irremplazable capital natural.
ESTADO DEL PATRIMONIO Y MEDIO AMBIENTE EN LA DEHESA BOYAL
La Dehesa Boyal de Montehermoso era hasta hace pocos años un territorio privilegiado para proyectos de conservación, educación ambiental, turismo de naturaleza, ornitológico y patrimonial, ya sea por tratarse de un hábitat de especial interés ambiental; por constituir un ejemplo representativo de un ecosistema natural igualmente amenazado; o por ser un espacio en óptimo estado de conservación desde un punto de vista natural y patrimonial, ya sea por las comunidades biológicas que albergaba o por la singularidad histórica del mismo.
ALTERACIÓN DE HABITATS
La tala de encinares, alcornocales, la eliminación de matorral, la realización caminos, carreteras y pistas forestales, la construcción de edificaciones, etc., son actualmente los factores más trascendentales que amenazan la subsistencia de las aves rapaces en Extremadura. La protección de zonas de vegetación natural constituye una de las mayores prioridades, evitando la destrucción de encinares, alcornocales y robledales, así como la construcción de carreteras, pistas y caminos cercanos a zonas de reproducción, de especies amenazadas. En el año 2008, por estos motivos varias rapaces abandonaron sus nidos, algunos con polluelos debido a este problema. Ocurrió cuando en plena época de reproducción se acometen los trabajos de adecuación de caminos en la dehesa boyal. El transito descontrolado de público por la dehesa acarrea un desequilibrio natural, incidiendo muy negativamente en la conservación de las especies que habitan en estos parajes.
Estas actuaciones alteran el hábitat natural de distinta manera: cuando se derriba o poda el árbol en el que tienen el nido; cuando se quita el matorral que lo rodea, se pierde toda la protección y el ave abandona el área de cría; algunas veces, las pistas, caminos, etc., se hacen en las cercanías de los nidos e incluso en la época de reproducción, causando la pérdida de la puesta o la muerte de los pollos; el efecto de las edificaciones y construcción de infraestructuras es adverso, al hacer perder por completo la tranquilidad que las rapaces necesitan para criar.
Es necesario prohibir actividades en época de nidificación y reproducción de las aves que están amenazadas, incidiendo especialmente en el peligro que corren las rapaces. Con estas acciones se pretende frenar el proceso de extinción de especies, mejorar la conservación de los espacios naturales y minimizar el impacto de ciertas actividades.
DESAPARICIÓN DE ESPECIES A CAUSA DE LA CONTAMINACIÓN
A raíz de los vertidos en el arroyo del Pez, se ha producido una enorme mortandad de peces, anfibios, reptiles, mamíferos e invertebrados y ha provocado que las aves ictiófagas, rapaces y carroñeras (principalmente milano negro, milano real, ratonero, halcón abejero, águila calzada, cigüeña blanca, cigüeña negra, garza real, garceta, martín pescador, correlimos, andarrios, y varias especies más de ánatidas y limícolas) alimentasen a sus polluelos con presas contaminadas, provocando una grave alteración de la cadena trófica alimentaria.
Aparte no podemos dejar de mencionar que se están destruyendo los últimos reductos de población de conejo en lo que fue hace poco tiempo una de las mejores zonas de cría y reproducción de esta especie en todo el norte de Cáceres.
ANALISIS DE DEBILIDADES Y AMENAZAS EN LA DEHESA BOYAL DE MONTEHERMOSO
• Alteración y destrucción de hábitats por cambios en el uso del suelo.
• Desaparición de gran superficie en la dehesa boyal.
• Degradación del medio natural.
• Deterioro de ecosistemas naturales y fluviales.
• Flora y fauna amenazadas.
• Desaparición de especies vegetales y animales.
• Alarmante pérdida de biodiversidad.
• Desaparición y descenso continúo de aves amenazadas.
• Proliferación de vehículos a motor en el hábitat crítico de reproducción de aves rapaces.
• Áreas de cría y reproducción de aves rapaces en peligro.
• Impacto visual.
• Impacto ambiental.
• Impacto acústico.
• Proliferación de botellones en parajes de la dehesa.
• Proliferación de vehículos a motor en zonas de nidificación de rapaces amenazadas.
• Aumento de carga de tráfico.
• Excesiva velocidad de vehículos.
• Complejo Arqueológico en mal estado.
• Complejo Etnográfico abandonado.
• Falta de política ambiental.
• Falta de inversión en la Dehesa Boyal.
• Falta de presupuesto para propósitos de conservación.
• Falta de un Programa de Actuación para la dehesa boyal.
• Falta de vigilancia.
• Incumplimiento de la legislación ambiental.
• Suspensión de Programas Educativos.
• Mala imagen del municipio.
• Falta de mantenimiento y conservación.
• Señalización en mal estado.
• Desaparición y falta de señalización de itinerarios.
• Perdida de visitantes.
• Aumento de escombreras y basuras.
• Desconocimiento del patrimonio natural de la dehesa boyal de Montehermoso.
Una sociedad sostenible controla su crecimiento económico, la contaminación, la explotación de los recursos y el tamaño de su población para que no exceda la capacidad de carga marcada por la naturaleza para mantener a la población sin deteriorarla ni hipotecar las posibilidades de las futuras generaciones.
 |
| (Rabilargo) Foto: Juan Jesús Sánchez Alcón |
.jpg)
